5 de mayo

 

 

 

 

 

 

 

 

 El 5 de mayo se festeja la victoria del ejército mexicano sobre las tropas francesas en la ciudad de Puebla en 1862, bajo el liderazgo del general Ignacio Zaragoza Seguín.

En esta noche del 5 de mayo el fútbol fue bueno. Hubo juego colectivo, hubo variantes, hubo hermanos en lados opuestos de la cancha. Hubo también picardía y faltas claras: camisetas rotas, rodillas rasgadas, cabezas erosionadas por el mal estado del esférico.

Ambos equipos intentaban, hubo talento y comprensión de las necesidades constantemente. Las voces de mando equilibradas, los jugadores concentrados. 

Igual que la semana pasada, una pelota se escapó por la red a la casa en construcción de atrás. Creo que esta vez nadie dijo nada. Por algo nos dan dos pelotas.

El rodaje que nos dió la semana anterior permitió que muchos de nosotros estemos en nuestra mejor forma. Por mi parte, me sentí bien y me voy conforme con mi rendimiento. Sentí que cuando fui al arco, el equipo se volvió estanco. No hacíamos goles y no nos los hacían. 

Hubo un pase que dió Mauro, del equipo rival a Diego, también del equipo rival. Y diego cabeceó bien. Y yo la saqué.

Sobre el final, una pelota que venía fuerte fue detenida por Manuel que, sin dejarla tocar el suelo, me habilitó para terminar de cerrar el partido.

Ganamos nosotros, la diferencia siempre fue de dos goles. Feliz 5 de mayo para todos los mexicanos.